¿Sabes la diferencia entre la mascarilla de oxígeno y un respirador?
¡Hola, queridos pasajeros de la vida y aspirantes a héroes en situaciones de crisis aéreas! Hoy hablaremos sobre la importancia de usar la mascarilla de oxígeno en los aviones. Sí, esas que caen del techo como confeti en una fiesta sorpresa.
Vamos a desmentir el mito de «primero los niños» y explicar por qué deberías ponerte primero la mascarilla, antes que a tu adorable hijo menor o a tu pareja. Serás más útil de esa manera para enfrentar cualquier situación de emergencia y quizás, ayudar a otros.
El dilema del héroe inconsciente
Imagina esto: estás a 10,000 metros de altura, disfrutando de las últimas tendencias en la red social TikTok (u otra) o preguntándote si el pasajero de al lado notará que estás ocupando un poco de su espacio extra de pierna, cuando de repente, ¡boom! Se produce una descompresión explosiva.
El tiempo entre darte cuenta de que el aire se siente un poco «diferente» y el momento en que te desmayas por falta de oxígeno es, en promedio, de unos 10 segundos. Sí, solo diez segundos, probablemente menos de lo que tardas en decidir si pides o no esa bolsa de snacks.
La lógica del oxígeno
Aquí entra en juego la importancia de las mascarillas de oxígeno y el por qué debes ponerte la tuya primero. Piénsalo: si optas por ponérsela primero a tu pequeño, ¿Quién estará consciente para ayudar a los demás? Definitivamente no serás tú. Te desmayarás más rápido que el tiempo que tarda tu app favorita en abrirse en un día malo de conexión.
La dura realidad es que, si te desmayas, tu hijo por mucho genio que sea jugando con tabletas, muy probablemente no sabrá cómo ponerte la mascarilla a ti. Así que, aunque suene duro, si no te ocupas de ti mismo primero, ambos podrían terminar desmayados, y eso no es precisamente el final heroico que nadie desea.
Un plan maestro para la supervivencia
Ponerse primero la mascarilla es como asegurarte de tener el chaleco salvavidas puesto, antes de intentar salvar a los demás en un naufragio. No es egoísmo, es pura estrategia de supervivencia. Y sí, tu instinto puede gritarte que protejas primero a un niño, niña o a tu amada (o), pero la ciencia y la lógica de seguridad te dicen que, si no respiras tú, no podrás asegurarte de que ellos respiren después.
Tipos de mascarillas de oxígeno para aviones
En el fascinante mundo de la aviación, la seguridad es un pilar fundamental. Entre las medidas que garantizan un vuelo tranquilo, se encuentran las mascarillas de oxígeno, elementos esenciales en caso de despresurización. Conocer sus tipos y funcionamiento te permitirá afrontar con mayor tranquilidad cualquier situación de emergencia aérea.
1. Cánulas nasales
También conocidas como bigotes o puntas nasales, son las más simples y comunes. Consisten en dos tubos pequeños que se introducen en las fosas nasales para suministrar oxígeno de bajo flujo. Son ideales para situaciones que requieren un aporte leve de oxígeno, como mareos o leves dificultades respiratorias.
2. Mascarillas con reservorio
En cuanto a suministro de oxígeno, lo encontramos en las mascarillas con reservorio. Estas cuentan con una bolsa flexible que almacena oxígeno adicional, asegurando un flujo constante y una mayor concentración de oxígeno, incluso si la respiración del pasajero se vuelve irregular.
3. Mascarillas de demanda
Están diseñadas para optimizar el consumo de oxígeno. Funcionan activando el suministro de oxígeno solo cuando el usuario inhala, lo que las hace ideales para situaciones de emergencia prolongadas.
4. Mascarillas de alta concentración
En casos de extrema necesidad, como emergencias médicas a bordo, se emplean este tipo de mascarillas. Proporcionan un flujo de oxígeno puro al 100%, cubriendo completamente la cara del pasajero para garantizar una máxima oxigenación.
Cada una tiene características y funciones específicas para atender las necesidades de los pasajeros en situaciones de emergencia. Entonces, cuando te dirijas a tu asiento, familiarízate con la ubicación de las mascarillas de oxígeno antes del despegue.
En caso de despresurización, coloca la mascarilla inmediatamente sobre tu nariz y boca, ajustando las correas para un buen sellado. Y, si viajas con niños, asegúrate de ayudarles a colocarse la mascarilla correctamente. Ante cualquier duda o situación particular, consulta a la tripulación de cabina.
Diferencia entre mascarilla de oxígeno y respirador
Mascarilla de oxígeno: en el caso de los aviones, su función principal es suministrar oxígeno suplementario o dar soporte, cuando el sistema de presurización de la cabina está presentando problemas o ha fallado del todo. Estando en un nivel tan alto, es vital controlar el flujo de oxígeno. Las mascarillas de oxígeno no filtran el aire del ambiente, por lo que no protegen contra la inhalación de contaminantes.
Respirador: en cambio, el respirador está diseñado para proteger al usuario de inhalar partículas peligrosas presentes en el aire, como polvo, humo, gases y aerosoles. Posee un filtro que elimina estas sustancias nocivas, proporcionando un sello hermético alrededor de la cara para garantizar una protección efectiva. Los respiradores se clasifican según su nivel de filtración y tipo de contaminante.
La mascarilla: esa Fashion Statement que salva vidas
La próxima vez que estés a bordo y la tripulación de cabina haga su baile de seguridad mostrando las salidas de emergencia y la forma de usar las mascarillas, presta mucha atención.
No es solo un “desfile de moda” de equipamiento de seguridad, es información que podría salvar tu vida. Y cuando las mascarillas caigan, recuerda: póntela primero como si fuera el nuevo accesorio de temporada que todos deben tener puesto, antes de ayudar a otros.
Reflexión Final sobre la mascarilla de oxígeno
La próxima vez que vueles, recuerda que antes de ser un héroe para otros, debes asegurarte de poder seguir respirando. Porque, al final del día, si no puedes respirar, tampoco podrás salvar a otras personas (de estar a tu alcance).
Para finalizar, piensa en las mascarillas de oxígeno como en la WiFi. Primero te aseguras de que esté funcionando para ti, antes de empezar a compartir la contraseña. Así de simple, así de crucial. Y ahora, a volar sabiendo que estás preparado para manejar la situación como un verdadero influencer de la seguridad aérea. Ya luego podrás hacer lo que corresponda, las reclamaciones por indemnización por muerte o lesiones en un accidente de avión.