Para calcular el lucro cesante debido a incapacidades permanentes resultantes de un accidente de tráfico, se consideran los ingresos netos percibidos durante el año anterior al accidente o la media de los tres años anteriores, siempre eligiendo la cifra mayor.
En caso de desempleo, se utilizan las prestaciones recibidas o, en su defecto, el salario mínimo interprofesional anual (SMI). En todos los casos, el cálculo nunca será inferior a este salario mínimo.
Tipos de Incapacidad permanentes
- Incapacidad Absoluta: imposibilidad de realizar cualquier trabajo. Perjuicio del 100%.
Ejemplo: Pedro, que no puede trabajar en absoluto, tiene un perjuicio del 100%. Según la Tabla 2C4, esto se calcula con base en su ingreso neto, ajustado al límite superior si está entre dos niveles.
Escenario: Pedro, que solía trabajar en una oficina, sufre un accidente que lo deja completamente incapacitado para cualquier tipo de trabajo. Antes del accidente, ganaba 30,000 euros al año. Su indemnización se calculará en base a este ingreso, con un perjuicio del 100%, resultando en una compensación que se puede ver en la Tabla 2.C.4
- Incapacidad Total: imposibilidad de realizar su trabajo habitual. Perjuicio del 55% hasta los 55 años y del 75% a partir de los 55 años.
Ejemplo: Marta, de 58 años, no puede seguir en su empleo habitual. Su perjuicio es del 75%, calculado con la Tabla 2.C.5.
- Incapacidad Parcial: reducción de ingresos o rendimiento laboral en un 33% o más. Perjuicio equivalente al importe de dos años de ingresos.
Ejemplo: Luis, cuyo rendimiento laboral ha caído un 40%, recibe una compensación equivalente a dos años de ingresos, según la Tabla 2.C.6.
Lesionados menores de 30 años
Para lesionados menores de 30 años que aún no han accedido al mercado laboral, el lucro cesante se considera sólo en casos de incapacidad absoluta o total, empezando a contar desde los 0 hasta los 30 años:
Incapacidad Absoluta: 1.5 SMI anual.
Incapacidad Total: 0.8 SMI anual.
Las indemnizaciones resultantes pueden verse usando las Tablas 2C7 y 2C8.
Lesionados dedicados a tareas del hogar
Para aquellos dedicados exclusivamente a las tareas del hogar, el lucro cesante se calcula desde la estabilización de las secuelas:
- Incapacidad Absoluta: contribución al sostenimiento familiar equivalente a 1 SMI, incrementado en un 10% por cada persona menor de edad, discapacitada o mayor de 67 años, sin superar 1.5 SMI.
Ejemplo: Carmen, que cuida de dos niños pequeños, verá su indemnización formulada desde el SMI incrementado en un 20%.
- Incapacidad Total: si impide realizar las principales tareas del hogar, se computa el 55% de 1 SMI. Incrementado en un 25% si no se percibe pensión.
Lista de enfermedades para incapacidad permanente
En España, las incapacidades permanentes son reconocidas o relacionadas, generalmente, cuando una persona sufre una enfermedad o lesión que le impide realizar su trabajo de manera definitiva. Pueden ser causadas por diversas causas, como algunas patologías (desde enfermedades crónicas hasta trastornos graves que afectan la funcionalidad física o mental de la persona) o, son consecuencias de algún accidente de tránsito.
1. Enfermedades musculoesqueléticas: las afecciones vinculadas a los huesos, músculos y articulaciones representan una de las principales causas de discapacidad permanente. Condiciones como la artrosis, la artritis reumatoide o los trastornos de la columna vertebral (hernias discales, espondilitis) pueden afectar gravemente la movilidad y la capacidad de trabajo.
2. Trastornos cardiovasculares: enfermedades como la insuficiencia cardíaca, los infartos de miocardio o las arritmias severas pueden derivar en una incapacidad permanente, debido a grandes sustos u otras razones. Los pacientes con estas condiciones a menudo sufren fatiga extrema y limitaciones físicas que impiden el ejercicio de su labor.
3. Enfermedades neurodegenerativas: la enfermedad de Parkinson y otras patologías neurodegenerativas pueden llevar a una pérdida progresiva de las funciones cognitivas y motoras, lo que puede generar una incapacidad permanente.
4. Trastornos psiquiátricos: la depresión severa, la esquizofrenia o los trastornos de ansiedad crónica por eventos traumáticos, también son causas frecuentes de incapacidad permanente.
5. Enfermedades respiratorias: como la EPOC, la fibrosis pulmonar o el asma grave pueden limitar la capacidad respiratoria, afectando la calidad de vida y la capacidad de trabajo.
Es fundamental contar con el asesoramiento de abogados especialistas en reclamaciones, para gestionar las solicitudes de incapacidad permanente, ya que cada caso debe ser evaluado de manera individualizada por los médicos y peritos correspondientes.
Conclusión
En España, las indemnizaciones por incapacidades permanentes constituyen un derecho esencial para aquellos quienes las padecen. Conocer las principales condiciones que pueden generar este tipo de incapacidad es clave para quienes buscan obtener la ayuda necesaria y proteger sus derechos laborales y sociales.
Para más detalles, consulta las tablas específicas mencionadas, nuestra calculadora online o escríbenos directamente.
